sábado, 28 de abril de 2007

La granja de ornitorrincos tuertos

Yo tuve una granja en Australia.

Era una granja de ornitorrincos, esos animales que Dios se inventó después de meterse un tripi. Pero mis ornitorrincos tenían una particularidad: eran ornitorrincos tuertos.

Al principio, cuando le pedí el crédito al banco para montar la granja en Australia, no me lo dieron. ¿Para qué coño quieres tú criar ornitorrincos tuertos?, me dijeron. Pero entonces les contesté que hay quien cría puercoespines que hablan y hacen fitness, y también hay quien educa a los teléfonos con ruedas para que hagan pirirí, pirirí, pirirí, y luego se forran con los anuncios de seguros. Vamos, que lo mío fijo que era negocio.

Los convencí. Luego lo más difícil fue encontrar a alguien que le sacara un ojo a cada ornitorrinco, porque, por alguna extraña razón, esos animales caen bien. Supongo que, cuando los miras, te acuerdas del pato Donald y los niños castores todos a la vez, y eso hace que tus neuronas te lleven inmediatamente al Tío Gilito; entonces ya no puedes hacerles daño, porque sería como dañar a tu fuente de ingresos. Conductismo, creo que se le llama a eso. Pero bueno, que ni idea de psicología.

Los ornitorrincos de mi granja tenían que ser tuertos para que no fueran como todos los demás ornitorrincos. Así, en el caso de que Steven Spielberg necesitara ornitorrincos tuertos para una de sus películas, sólo los encontraría en mi granja. Y me tendría que pagar una pasta.

Como nadie quería sacarle los ojos a mis ornitorrincos, se me ocurrió que podía darles chocolate. Dicen que, si le das de comer chocolate a los perros, se quedan ciegos. Pero como no quería ornitorrincos ciegos, sino tuertos, sólo les daba de comer por el lado derecho del pico.

Pasaron unas semanas, y nada. Los ornitorrincos se pusieron como vacas, pero seguían viendo por los dos ojos. Así que se me ocurrió ponerles unos parches, en plan pirata, que les daban un toque muy malvado. Entonces descubrí que esos bichos parecen inofensivos sólo cuando los dejas en su medio natural, pero cuando los cebas y les tapas un ojo, dan mucho miedo.

Un buen día, les estaba dando su ración de chocolate y me estaba fumando la mía, cuando apareció un barbudo la mar de raro que me dijo: "Oye, que tu madre se ha comido a mi perro". A veces le pasa, a la pobre. Resulta que le mordieron unos monos salvajes, y ahora se come todo lo que tenga rabo (menos a Lucía, porque mi madre tiene mucha sensibilidad poética).

Bueno, la cuestión es que yo le dije a ese tío que no tenía ningún perro con el que suplir al suyo, pero que a cambio podía llevarse uno de mis ornitorrincos tuertos. Y pasó lo más grande, lo que yo siempre supe que pasaría. Al verlos, el hombre se volvió como loco, y chillaba y saltaba, y decía cosas en inglés, incluso me abrazó. Y por fin me dijo que me los compraba todos, pero todos, todos. Que fijara un precio y que su productora lo pagaría.

Y ya sabéis el final de la historia. Yo no me forré tanto como creía, porque el viaje de vuelta me costó una pasta, pero mis ornitorrincos han salido en un montón de películas, como en unas tres: La comunidad del anillo, Las dos torres y El retorno del rey. Ah, y cuando se jubilen, creo que la reina de Inglaterra ya se ha interesado por adoptar a dos.

Sí, lo sé. Parece mentira.

15 comentarios:

elopinador dijo...

Si tu madre come rabos..prefiero no saber cuál es tu profesión, a parte de redactar de puta madre

blogservador dijo...

Como una entrada de blog puede empezar con 'Memorias de África' y acabar con el 'Señor de los Anillos' y que no tenga nada que ver con ninguna de las dos películas..aunque pensádolo bien, cual es el nudo argumental de la entrada. Es me he perdido con los parches.

blogservador dijo...

Perdón por el primer cómo que lleva acento y perdón porque no sé cómo arreglarlo sin volver a escribir.

blogservador dijo...

Creo que me duele la barriga por la falta de ortografía...No sé si volver a blogservar nunca más.

cacahuete dijo...

He leído tu perfil y te falta Suede. Cuando hago el amor suelo mirar a la cara de otras, nunca a la de ella.Besos y saludos.

Para, creo que voy a vomitar dijo...

"Braindead.Tu madre se ha comido a mi perro", qué gran película!!! Grandes recuerdos pasados por el triturapuré.

La historia de los ornitorrincos me ha cautivado tanto como el naranjito de abajo. Quiero Trina.

Por cierto, si quieres puedes llamarme Arcadas, que es como suelen hacerlo por estos lares. Amos, si quisieres.

Para, creo que voy a vomitar dijo...

¿Si quisieres?

No, no he vuelto a la edad media, es que me he equivocado..., quería decir "si quieres"

Churra dijo...

Ya lo dijo el tempranillo, hay gente pa´tó. O siempre hay un roto para un descosido o como decia mi madre, que a dios gracias no comia perros, hay ojos que de legañas se enamoran.

Encantada .Besos

Mel Alcoholica dijo...

Pero qué haceis todos en casa un sábado por la noche????

Os quiero en los bares ahora mismo, a ver si voy a tenérmelas que ver yo sola con todo el alcohol que corre por ehí!

Actor Secundario Bob dijo...

Saludos del tío Bob!

francisco m. ortega dijo...

Hola Mel.
Gracias por añadirme a tus enlaces. También hice lo propio con tu 'blog' y lo coloqué entre los míos. (Te dejo aquí este comentario porque no encontré un email).

Saludos cordiales.

Bowie dijo...

hola hola

¿siempre escribes así de bien? ¿los ornitorrincos son maíferos?

ey, en respuesta a tu pregunta: León es mi perro, un cocker spaniel canela

va el abrazo

Zebedeo dijo...

Lo sabía, lo sabía, sabía que la granja de ornitorrincos tuertos era negocio seguro. Te me has adelantado. Voy ahora mismo al banco para poner a parir al que no me dió el crédito para montarla. Siempre me pasa igual soy un incomprendido en las entidades bancarias.

La próxima vez que intente montar un negocio de ese tipo te he de avisar porque veo que tú tienes mejores contactos.

Un brindis.

Mel Alcoholica dijo...

Blogservador: la carencia de ortografía recibe el nombre de gramatitis. Hoy día no es grave.

Atomarporculo: dicen que el amor es ciego, y tú vas y ves demasiado. Disfrtuta de tu hipermetropía sexual.

Arcadas: pobre Naranjito. Primero lo exprime Luci, y ahora tú quieres triturarlo...

Churra: los ojos legañosos de Atomarporculo se enamoran de aquélla a la que no miran. Hay gente pa tó.

Actor secundario Bob: Te saludo. Y te linkeo.

Bowie: qué más quisieras tú que ser Bowie. O mejor: qué más quisiera yo que lo fueras!

Zebedeo: ¿qué tal si montamos el gran circo mundial del bollo que habla?

Alberto Ramos dijo...

Feliz ornitorrinco, que diría Ramón García.