jueves, 25 de octubre de 2007

Julio Verne es Google

Atención: este post puede herir la sensibilidad de los tintinófilos.

Estaba anoche comulgando con el cáliz espiritual... porque el alcohol, en catalán, también recibe el nombre de "esperit", o sea: espíritu. Lo cual tiene su sentido, ya que, al obtenerse mediante destilación, se eleva. Y el espíritu también se eleva. De ahí que, en realidad, el alma sea la parte etílica que hay en nosotros. Así que, a lo mejor, los borrachos y los alcohólicos tienen más alma que los abstemios. Algo en absoluto descartable, puesto que quienes empinan el codo se sienten más cerca del cielo, y a veces ven ángeles y elefantes rosas y otros seres volátiles.

Pero ya me estoy desviando del tema principal. Volvamos a empezar: estaba anoche tomándome unos vinos, cuando de repente me acordé de Tintín. No es que piense muy a menudo en él. Tengo un amigo belga que es periodista y se parece bastante a Tintín. De hecho, es una mezcla física de Tintín y John Cusack. Yo preferiría que se pareciera más a John Cusack que a Tintín, pero se parece a los dos por igual. En fin, anoche no pensaba ni en mi amigo ni en John Cusack, sino en Tintín a secas. No recuerdo por qué. Sólo sé que pensaba en él, y lo hacía a media voz (porque aún no he recuperado la voz del todo), y otra voz me dijo que Tintín era un gilipollas.

Bueno, primero dijo que era un aburrido, pero luego se animó y lo llamó gilipollas. Entonces, mi mediavoz contestó: "Hombre, no te pases, que el tío llegó a la Luna antes que nosotros". Como si "nosotros" hubiéramos estado en la Luna alguna vez. Que, dado que bebo alcohol, y que el alcohol se eleva como el espíritu, y teniendo en cuenta que la Luna no queda tan lejos, también puede ser. Pero no soy consciente de ello.

La cuestión es que dije que Tintín se nos había adelantado yendo a la Luna, y la otra voz respondió: "Sí, pero con bombachos. Ya me dirás tú qué mérito tiene ir a la Luna con bombachos". Es verdad: si viera a alguien con bombachos podría enviarlo a la Luna de una patada en el culo. Queda un poco ridículo ir en bombachos por la calle, así que viajar a la Luna en bombachos es el colmo.

Hubiera hecho una larga disertación filosófica sobre el uso y abuso de bombachos, pero la otra voz había cambiado de tema: "Además, Julio Verne estuvo en la Luna antes que Tintín".

Entonces mi mediavoz y la otra se quedaron un buen rato en silencio, supongo que reflexionando, aunque creo que las voces no reflexionan, sólo fingen que lo hacen, y entonces emiten sonidos como mmmmm. Bueno, se quedaron un rato en silencio mientras nosotros reflexionábamos, aunque creo que las personas tampoco reflexionan, sólo fingen que lo hacen, y obligan a sus voces que emitan sonidos como mmmmmmm.

Sea como sea, un minuto más tarde la otra voz preguntó: "¿Nunca has pensado que Julio Verne es Dios?".

La verdad es que no, nunca antes lo había pensado. Pero claro, es que el tío lo sabía todo. No antes de que sucediera, sino incluso de que existiera! Julio Verne se pasó cinco semanas en globo, viajó al centro de la tierra, fue a la Luna, se pateó veinte mil leguas de viaje submarino, descubrió una ciudad flotante y una isla misteriosa, dio la vuelta al mundo en ochenta días, conoció a los hijos del capitán Grant y a Miguel Strogoff, fue a una escuela de Robinsones y tuvo tribulaciones en China antes de que las tuvieran los Klamstein (Ángelalansbury Klamstein incluida). Encima tuvo tiempo de escribirlo todo. Y está claro que no hay tiempo para eso. A no ser...

...a no ser que seas Dios.

"Dios!", exclamó mi mediavoz. Y luego hizo un sonido de reflexión.

"Entonces, Julio Verne sigue entre nosotros", acerté a decir por fin. "Sí", contestó la otra voz solemnemente.

Julio Verne lo sabe todo y está en todas partes. Puedes preguntarle lo que quieras y te responderá lo que le dé la gana. Es omnipotente y omnipresente. También tiene el don de la simultaneidad, porque puedes consultarle a la vez en la China donde tribuló y en el resto del mundo que volteó en 80 días. Está en casi cada uno de nuestros hogares. Está nuestras oficinas, en los colegios, en las universidades. Tú le rezas para que sepa decirte por favor, por favor, por favor en qué año nació Fernando Esteso y él va, y te lo dice unas 42.200 veces. Le rezas para que te diga por favor, por favor, por favor, qué tiempo hará hoy, y también te lo dice unas 317.000.000 veces. Y siempre te lo dice por escrito, porque le encanta escribir. De hecho, ni siquiera te exige que se lo pidas por favor. Pero como soy muy educada, me costó años descubrir eso.

En cualquier caso, este Julio Verne es la ostia, pero no sé si puedo decirlo tratándose de Dios. Por eso, creo, recibe el nombre de Google, que es menos sacrílego y permite el uso de la palabra ostia 6.580.000 veces.

La cuestión es que anoche recuperé la fe. Y comulgué unas cuantas veces más con el cáliz espiritual para celebrarlo. Pues eso. Quiero decir: amén.

12 comentarios:

Alberto Ramos dijo...

Si Julio Verne es Google, Jonathan Swift (otro que veía ciudades flotantes) es Yahoo.

Diamante dijo...

Creo que dios actualmente es Wikipedia, y no tanto por la recurente ensoñación común de salir a la calle con las zapatillas de andar por casa, si no por que John Cusack es lo que es por haber echo "16 velas" con su hermana Johana Cusack allá por los 88.

errante dijo...

amén

Monseñor Senovilla dijo...

Si Google es Dios, yo soy el primo de Rajoy.

Puedes hacer la prueba ontológica del algodón: abre Google y pídele que te encuentre algo que hayas perdido. Por ejemplo, los papeles.

Si, a pesar de los 5.500.000 resultados, sigues siendo una "sin papeles", habrá quedado demostrado que ni el cambio climático ni el clima de crispación me vienen de familia.

Saludos desde la omnisciencia.

Mel Alcoholica dijo...

Rajoy hace el primo hablando de su primo. Por lo tanto, Rajoy es un primo. Por lo tanto, el primo de Rajoy es el Bonico del tó.

O sea, éste: http://www.youtube.com/watch?v=9nWKXn8JuMM&eurl=

Anónimo dijo...

Fernando Esteso nació el 16 de Febrero de 1945.
Me hizo gracia ese comentario. Fernando Esteso suena a anacronismo. Sin embargo es un ser contemporáneo

rotario dijo...

yo comulgaré esta noche, pero no con agua bendita, vino, sino con algún que otro botellín de kronenbourgh.
Mi espíritu -verde- se elevará y entonces seguro que mi cabeza pega un giro in-esperado.
Hoy es el día. Me lo ha dicho Julio Verne.

Don Peperomio dijo...

os recomiendo que veáis esta noche en cuatro el programa "callejeros", que muestra la realidad de un barrio de aquí de málaga en el que yo viví hasta los 18.
Saludos

vaderetrocordero dijo...

Completamente de acuerdo. Tintín es el demonio. Muerte a los Tintín macutes por herejes! Cualquier (buen) aficionado a los cómics te dirá lo mismo... aunque tengamos a Hergé en la estantería!

Don Peperomio dijo...

Supongo que tu Palma era de Mallorca...

Luigi dijo...

También en castellano. Según la R.A.E. "espíritu" se define como "vapor sutilísimo que exhalan el vino y los licores."

Y es que en cuestión de empinar el codo, no hay muchas diferencias.

No en vano, Jesucristo en su última cena, también brindó en su despedida de los apóstoles con un buen tinto.

En cualquier caso, permítame brindar con usted.

Don Peperomio dijo...

Ahí voy: hay una teoría tintinfóbica que dice que el periodista belga de flequillo y bombacho es homosexual y está liado con el capitán Haddock. Por eso en "Tintín en el país de los soviets", en la página 35 el susodicho le dice a Haddock: "Soy tu marinerito, tómame, tómame".

Rompiendo mitos