domingo, 30 de septiembre de 2007

Respalda


Ayer me levanté de espaldas a mí misma. No es lo mismo que levantarse girada. Tampoco es lo mismo que levantarse al revés. Si te levantas al revés, te pones de patitas en el techo y listo. Levantarse de espaldas a ti mismo es más complicado, porque intentas entrar en razón, pero no hay manera: no te haces caso. Y además, que yo sepa, la razón no tiene ni derecho ni derecha, aunque La Razón sea de derechas y los derechos se tengan que firmar en plenas facultades mentales y racionales.

Pero a lo que iba, cuando te levantas de espaldas tampoco puedes encararte a ti mismo. Como mucho, puedes intentar perseguirte un rato. Decirte: "Eh, espera, date la vuelta", algo así. El problema es que cuando te levantas de espaldas y caminas, las rodillas se te doblan en dirección contraria a la que les corresponde y es muy incómodo, te sientes como una grulla, o como un flamenco. Y una es belga, pero no tanto.

Encima tienes la impresión de que lo dejas todo atrás y, a la vez, de que no avanzas, y bueno, a eso sí que estamos acostumbrados. Pero una cosa es estar acostumbrado porque te crees un filósofo, y ves el tren de tu vida pasar, dejando atrás los viñedos y los campos de tu niñez, mientras el resto del convoy, tan largo él, tan lleno de camarotes y vagones-bar, impide que divises el futuro... una cosa es imaginarte eso porque te crees poeta filósofo, digo, y otra muy distinta darte cuenta de que, de repente, tu vida es así de verdad, sin metáforas. Todo porque te has levantado de espaldas.

Entonces estás obligado a reconocerte, como cuando te ves de perfil, pero de espaldas. Y reconocerse es un coñazo, porque todos los re-algo son un coñazo. Porque, de hecho, la nota re es un coñazo, aunque también es necesaria. Aunque no tiene la gravedad del do, ni la simplicidad del sol, ni la posesión del mí, ni la duda del si, ni la la de la.

El re es como un fa, pero en re. O sea, lo mismo que como cuando te ves de perfil, pero de espaldas. No sé si me explico.

La cuestión es que ayer me levanté de espaldas, supongo que porque la frente se me quedó pegada en la almohada. Y decidí que, ya que estaba, cambiaría de vida. Mi miré al espejo, me sentí como Magritte, belga como yo, no sé si flamenco. Y desde entonces veo en mi reflejo el imposible.

Re-flejo. Otra vez re.

En francés, re se dice je. No saben pronunciar la erre.

Recomencemos, reinterpretemos, reinventemos. Repitamos. Re. Je, a lo francés.

Rererere.

Jejejejeje.

13 comentarios:

reblog dijo...

Pues yo te requiero o te requetequiero.

Anónimo dijo...

recién me doy cuenta de que me he despertado muchas veces de espalda, que incluso he estado días de espalda... de hecho son períodos en que simplemente muestro el lado protector de mi mismo, por que el original el de adentro está dañado como para ser expuesto. Salu(d)os!

Alberto Ramos dijo...

Pues ya es mala suerte que no sepas pronunciar la erre y tu país se llame Francia y sea una república. Y si te llamas Robespierre, ya ni te cuento.

Es como si en España no supiéramos pronunciar la eñe, o en Catalunya la enya, que además graba discos.

Luigi dijo...

Disculpe por mi obsesión en ver la botella media llena.

Una de mis palabras favoritas es re-pito (sólo la utilizo en lo que megusta, como sabiamente habrá podido deducir.)

Lo más complicado de esos días en que uno se levanta de espaldas es que hay que estar muy atento a cuando toca miccionar o expeler una ventosidad, ya que con las referencias cardinales intercambiadas puede llevarse algún disgusto.

Óscar Varona dijo...

Recoño!!!! Una compañera de efluvios alcoholicos que ademas ni siquiera se ve en el espejo. Buen texto, si señorrrrr.

Mel Alcoholica dijo...

Reblog: ¿realmente?

Juan Pablo: ¿recién?

Al: recitando a mi abuela la valona, "El can de san Cosme no tiene cola ya que Amón Domínguez se lo ha quitado".

Luigi: ¿re-pito son dos pitos? ¿Me habla usted de tríos?

Óscar: repámpanos y retruécanos.

Luigi dijo...

pito-pito gorgorito, escoja usted el mas bonito :-)

Anónimo dijo...

y todo por no decir que le va a usted de culo; se ha levantado de culo y de culo le va y mirandose al espejo tan noble parte ha decidido cambiar el rumbo de su vida hacia una mucho mas color (a lo Magritte piloto)y en todo ello muestra que esta atravesando momentos de duda (no se si razonable) sobre sus propias facultades y lo que con ellas consigue.


De gratis las primeras sesiones.

Anónimo dijo...

Hasta el blog me considera un anonimo mas... añada mi firma al anterior comentario.

vaderetrocordero dijo...

Tomo nota de que eres más valona que flamenca, de lo que deduzco que preferirás el fútbol a los toros.

Monseñor Senovilla dijo...

Rediós.

El trío soy Yo.

errante dijo...

jajajajaaj

Zittric dijo...

NO SE SI ES UN POCO TARDE PARA COMENTAR...PERO CREO QUE ESE DOMINGO DE SEPTIEMBRE DE 2007 ESTABAS CON TREMENDA CAÑA...Y LA CERVECITA DOMINGUERA?...EL DESAYUNO DE CAMPEONES.


SALUD!