jueves, 12 de junio de 2008

Miss X

Me disponía a hablar de Miss X, una compañera del trabajo que está loca, no lo sabe, y dice frases del palo: "Oye, pava, que sepas que yo no te he traicionado".

Es como una Lara Croft vestida de ejecutiva de película yanqui, con un buen par de tacones, que un día descubrió este blog y si lee lo que pongo ahora flipará pepinos y yo lo veré desde mi mesa, y me reiré bastante, porque ella no sabe que yo sé que ella sabe.

Pero bueno, la cuestión: iba a contar que Miss X está a punto de irse a Las Vegas, sola, a jugarse el destino a las cartas, o sólo unas vacaciones al bingo. A vacilar a los conductores de camiones, a matarse a Dry Martinis en una piscina en medio del desierto. A inventarse un amor de carretera mientras hace autostop. A convertir su vida en una puta road movie o a vomitar en la moqueta de su habitación. A llenar la bañera de espuma o a conocer unas cuantas perras y tragárselas, comérselas. A casarse, quién sabe, y lo peor: quién sabe con quién. Vestida ella de Elvis y él, de Mosso d'Esquadra, de Benicio del Toro o de Shrek, por qué no.

Estaba a punto a confesar una admiración que otras chicas han confundido con deseo, rollo aquí estás, aquí te morreo. Miss X y yo hemos compartido gustos, algún amante, y una pretendiente que intentó mordernos la boca después de haber pasado la noche con media redacción. No es que esa pretendiente sea lesbiana (entre otras cosas, porque ahora esa atribución sirve únicamente para designar a las habitantes de Lesbos), es que creo que hace colección. También le preguntó a mi amiga E, sibilinamente, si vivía sola.

Las redacciones de diario no son casas de putas, sino de malas putas y algún cabrón, pero más bien pocos. Aunque, eso sí, estratégicamente colocados de jefes. O colocados, punto; más de uno ha salido del baño con pintas de acabar de comerse una ensaimada.

Iba a hablar de mujeres tan guerreras que se jactan (o no) de lucir cicatrices, de mostrarlas con un gesto, una mirada, una palabra. Momentos para siempre grabados en sus vidas y en las de aquellos que, de repente, y sin venir a cuento, tropiezan con ellas, laboralmente o en un bar.

Todos podemos ser camioneros en Nevada. Vemos a esta autoestopista, Lara Croft de incógnito, y nos detenemos o pasamos de largo. Por si acaso. Pero la habremos visto, habremos visto más de lo que pretendíamos; del mismo modo que ella nos vio. Pretendiéndolo o no.

Quería referirme a la valentía de Miss X, que unos interpretarán como incauta y otros como temeraria, y yo, simplemente, como envidia. La soledad, en estos casos, es factible cuando se plantea literaria o adolescente. Pero, aunque excitante, de pronto imaginarme sin nada ni nadie en aquel antiguo camino hacia Texas -fue un español, Antonio Armijo, quien le dio nombre a Las Vegas- me desprende de lo que se me antoja como realidad.

Entonces es cuando me doy cuenta de que tengo miedo. Nunca antes había sospechado siquiera que pudiera tenerlo. Soy cobarde porque mi compañera de trabajo es capaz de hacer algo que, no es que yo no sea capaz de hacer, sino que, hasta hace un tiempo indeterminado, hubiera hecho sin dudarlo.

Recuerdo que se lo comenté a Miss X una noche diseñada para olvidar. También recuerdo que me contestó: "Tú podrías hacerlo con alguien, y eso, a mí, sí que me parece impensable".

Por primera vez en mi vida, una persona me considera más sociable que ella misma. Me sentí igual que cuando alguien dice que soy cariñosa pero que no lo sé.

Como digo, estaba a punto de contar todas estas cosas, cuando, de repente, mi teléfono móvil ha vibrado. Siempre lo tengo en silencio. No me gustan las estridencias. El móvil ha vibrado, y ponía: mensaje nuevo, y el número del mensaje era un número desconocido.

El texto del mensaje era: NO.

Así, en mayúsculas. Nada más: NO.

Entonces me he dado cuenta de que "no" puede significar demasiadas cosas. Pero siempre lo atribuiremos a aquello que estábamos a punto de hacer.

A aquello que ya nunca haremos.

8 comentarios:

Alberto Ramos dijo...

Autostop es pararse a sí mismo.

Don Peperomio dijo...

Vaya.
Es en estos momentos cuando me gustaría escribir algo que reflejara lo mucho que me ha gustado el texto y soltar algo ingenioso. Pero me pillas bajo de defensas.
Te aplaudo desde la admiración y listo.


Ahm. Y un saludo a Miss X, por si también lee los comments.

Me voy a seguir viendo Californication.

Benjuí dijo...

Señora mía:
Está usted entrando en lo que Richard Ford, en su peazo novelón "Acción de Gracias", llama el Período Permanente. Y no me voy a pone a explicar aquí lo que quiere decir con esa expresión, pero leyéndote me he dado cuenta de que sí.

Por otro lado, ¿no crees que en esta vida tenemos más cosas que hacer que irnos a Las Vegas a hacer o descubrir lo que esa chica piensa que podrá hacer o descubrir allí?

Igual no.

Igual lo que pretende es un viaje iniciático. A sus alturas.

A sus alturas, quien no haya tenido ya su viaje interior, o iniciático, o un rito de paso, o algo, tendría que hacérselo mirar; y con uno, con tal de que se haya hecho en condiciones, ya vale. La vida es demasiado corta como para estar todo el rato iniciándose.

(Iniciándose, ¿en qué, digo yo? Descubrir cosas es una cuestión de actitud, no de cambiar de paisaje, ya lo dijo alguien mucho mejor, y tener el cuerpo y el coco en sintonía es cosa de salud, mental y de la otra, así que...)

38 grados dijo...

Que Ms. Croft no se fíe de los camioneros en Nevada... llevan sombrero de cow-boy y no se les ve los ojos....por cierto, tu móvil ponía ON. Lo que pasa es que lo leíste con el móvil girado.
Muas.

Zittric dijo...

NO ....el mensaje que no le llegó a otro y quedó en la incertidumbre con una pregunta planteada.

SALUDOS

El maligno dijo...

Sí, es verdad llevo más pomada en el cuerpo que la que Ronaldinho debería ponerse en sus lesiones para volver a rendir, también he hecho un "mano a mano con papá" con el verdadero padre del siglo XXI: Tolo, a base de vino hindú (tan malo como aparenta)...

Aún así me veo en condiciones de decir que este es el puto y jodido mejor post de la historia de este jodido y malparido bloj... hostia ya!

Unknown dijo...

Joe, la perreza que me da ponerme a leer blogs detexto e inexplicablemente me engancho a los tuyos abandonándome al placer de su lectura y olvidando el número de párrafos restantes para acabar. Eres muy buena

hell agus dijo...

Una pregunta: ¿crees que debo escribir el escatológico Blog-Libro "Hoy no me he cortado las uñas", o, por el contrario, le debo ahorrar esta basura a la Humanidad?
Espero tu sincera respuesta en mi blog, a ser posible en la entrada llamada "La Portada".
Anticipadamente:
Hell Agus
Saludos